jueves, 7 de agosto de 2008
En defensa de la prensa libre
Por Cristian Valencia - Columnista de El Tiempo - Colombia
Domingo 25 de mayo de 2008
Transmitir en directo una noticia en el justo momento en que está sucediendo es uno de los principios del periodismo. La mayoría de cadenas de noticias en el mundo pagarían oro por estar en el momento justo de cada noticia. De eso se trata una 'chiva'. La radio nacional vive en esas: siempre está en el lugar de la noticia. Por eso es tan sospechosa la posición de la Comisión Nacional de TV con respecto a Citytv, cuando transmitió en directo el comunicado del sargento y su granada. La CNTV ordenó la suspensión de la transmisión en directo. Y como eso se llama censura, entonces esto se jodió. Porque van a poner sobre el mantel la pertinencia o no de transmitir las noticias en caliente. Seguro determinarán que en caliente no. Y entonces esto se jodió más. Porque cuando se tiene la forma de estar en vivo y en directo desde el lugar de la noticia, dicen los cánones del periodismo, es obligación transmitir. Si no se hace de inmediato y en caliente, entonces habrá oportunidad para autocensurarse o que censuren otros, para luego elegir las imágenes más convenientes. Y aquello de la libertad de prensa será algo para estudiar en las universidades y hacer elocuentes charlas en grandes auditorios, pero no será verdad.
¿Qué cadena de televisión no transmitió las imágenes, en vivo y en directo, del ataque a las Torres Gemelas? Todas interrumpieron su programación habitual y, que yo sepa, ninguna ha sido juzgada por ese detallito.
La retoma del Palacio de Justicia se transmitió en vivo y en directo. El tanquetazo a la fachada, imágenes de quienes salieron con vida; y la radio transmitió en vivo y en directo las palabras desesperadas de Reyes Echandía. Recuerden, por favor, que esas imágenes y esas voces fueron literalmente sacadas del mercado informativo durante los siguientes días y meses. Porque había verdades incómodas, con las cuales no se podía tejer tan fácilmente una versión oficial de los hechos.
Recuerden, por favor, que Daniel Samper Ospina, director de SoHo, el año pasado tuvo que enfrentar una demanda por haber publicado unas fotos artísticas. Y que un periodista de Cúcuta, Renson Zaid, fue demandado por escribir que un libro de poesía era pésimo. Y es que resulta que hoy en día hay un poco de periodistas investigados por injuria y calumnia.
La prensa nacional siempre ha gozado de buena reputación. Y los columnistas de periódicos y revistas están allí por su trayectoria, por su seriedad, por su compromiso. Alfredo Molano, por ejemplo, es uno de ellos. Nadie puede desconocer la trayectoria de Molano; nadie puede desconocer que muchas veces ha sido amenazado; que incluso tuvo que irse del país por temor; que sus opiniones siempre han sido incómodas para la oficialidad.
Varios miembros de la familia Araújo, de los Araújo bien, lo tienen demandado por una columna en donde hablaba de los Araújo que tienen o han tenido, como todos saben, problemas con la justicia. Y si el juez que le toque en suerte este caso decide culpar a Molano, se habrá sentado un precedente funesto para la libertad de prensa en el país. Será poner una mordaza muy sutil, y legal, a todos los periodistas que todavía se atreven a decir algo. Porque todos tendremos miedo de decir lo que toca cuando toca. Qué miedo un país en donde los formadores de opinión vivan con el fantasma de la cárcel encima. ¿Quién se atreverá a decir algo? Qué miedo un país en donde todas las opiniones sean del mismo talante y con las mismas posiciones. Qué miedo.
Invito a todos los periodistas del país a que unamos las voces en la defensa de nuestra libertad de prensa. Invito a todos los ciudadanos y periodistas a que apoyemos a Alfredo Molano en este momento. De su apoyo dependerá el tipo de información que usted reciba en el futuro. En el siguiente blog encontrará una carta de apoyo y una dirección adonde enviarla. http://prensalibrencolombia.blogspot.com cristianvalencia@yahoo.com
Domingo 25 de mayo de 2008
Transmitir en directo una noticia en el justo momento en que está sucediendo es uno de los principios del periodismo. La mayoría de cadenas de noticias en el mundo pagarían oro por estar en el momento justo de cada noticia. De eso se trata una 'chiva'. La radio nacional vive en esas: siempre está en el lugar de la noticia. Por eso es tan sospechosa la posición de la Comisión Nacional de TV con respecto a Citytv, cuando transmitió en directo el comunicado del sargento y su granada. La CNTV ordenó la suspensión de la transmisión en directo. Y como eso se llama censura, entonces esto se jodió. Porque van a poner sobre el mantel la pertinencia o no de transmitir las noticias en caliente. Seguro determinarán que en caliente no. Y entonces esto se jodió más. Porque cuando se tiene la forma de estar en vivo y en directo desde el lugar de la noticia, dicen los cánones del periodismo, es obligación transmitir. Si no se hace de inmediato y en caliente, entonces habrá oportunidad para autocensurarse o que censuren otros, para luego elegir las imágenes más convenientes. Y aquello de la libertad de prensa será algo para estudiar en las universidades y hacer elocuentes charlas en grandes auditorios, pero no será verdad.
¿Qué cadena de televisión no transmitió las imágenes, en vivo y en directo, del ataque a las Torres Gemelas? Todas interrumpieron su programación habitual y, que yo sepa, ninguna ha sido juzgada por ese detallito.
La retoma del Palacio de Justicia se transmitió en vivo y en directo. El tanquetazo a la fachada, imágenes de quienes salieron con vida; y la radio transmitió en vivo y en directo las palabras desesperadas de Reyes Echandía. Recuerden, por favor, que esas imágenes y esas voces fueron literalmente sacadas del mercado informativo durante los siguientes días y meses. Porque había verdades incómodas, con las cuales no se podía tejer tan fácilmente una versión oficial de los hechos.
Recuerden, por favor, que Daniel Samper Ospina, director de SoHo, el año pasado tuvo que enfrentar una demanda por haber publicado unas fotos artísticas. Y que un periodista de Cúcuta, Renson Zaid, fue demandado por escribir que un libro de poesía era pésimo. Y es que resulta que hoy en día hay un poco de periodistas investigados por injuria y calumnia.
La prensa nacional siempre ha gozado de buena reputación. Y los columnistas de periódicos y revistas están allí por su trayectoria, por su seriedad, por su compromiso. Alfredo Molano, por ejemplo, es uno de ellos. Nadie puede desconocer la trayectoria de Molano; nadie puede desconocer que muchas veces ha sido amenazado; que incluso tuvo que irse del país por temor; que sus opiniones siempre han sido incómodas para la oficialidad.
Varios miembros de la familia Araújo, de los Araújo bien, lo tienen demandado por una columna en donde hablaba de los Araújo que tienen o han tenido, como todos saben, problemas con la justicia. Y si el juez que le toque en suerte este caso decide culpar a Molano, se habrá sentado un precedente funesto para la libertad de prensa en el país. Será poner una mordaza muy sutil, y legal, a todos los periodistas que todavía se atreven a decir algo. Porque todos tendremos miedo de decir lo que toca cuando toca. Qué miedo un país en donde los formadores de opinión vivan con el fantasma de la cárcel encima. ¿Quién se atreverá a decir algo? Qué miedo un país en donde todas las opiniones sean del mismo talante y con las mismas posiciones. Qué miedo.
Invito a todos los periodistas del país a que unamos las voces en la defensa de nuestra libertad de prensa. Invito a todos los ciudadanos y periodistas a que apoyemos a Alfredo Molano en este momento. De su apoyo dependerá el tipo de información que usted reciba en el futuro. En el siguiente blog encontrará una carta de apoyo y una dirección adonde enviarla. http://prensalibrencolombia.blogspot.com cristianvalencia@yahoo.com
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario